¡La moda del selfie no para! Aunque el concepto de la autofoto no es nuevo (en 1839 Robert Cornelius se realizó una fotografía de sí mismo), el término selfie empezó a popularizarse en los primeros años del siglo XXI (primero en Myspace y después en las redes sociales que conocemos hoy). Sin embargo, a partir de 2010 se empezaron a optimizar las cámaras frontales de los smartphones, estas mejoras provocaron el aumento de las autofotos a nivel internacional. Incluso hay personas que sufren adicción a los selfies.
El palo selfie
Este verano (estemos donde estemos, ya sea en la calle, en la playa, en una fiesta, en un baño público…) podemos ver a cualquier persona haciéndose una autofoto con un “palo selfie”, un instrumento que nos permite enfocar a una distancia mayor de la que alcanza nuestro brazo. Hay modelos y colores de toda índole.
Aunque parece un invento del año 2015, hay que decir que en 1983 la cámara Minolta Disc-7 incluía un palo y un espejo convexo en su parte frontal para permitir las autofotos. De hecho, el “palo selfie japonés” apareció en 1995 en el libro 101 inventos japoneses más inútiles. Sin embargo, no fue hasta el año pasado cuando el gadget fue elegido entre los 25 mejores inventos por la revista Time.
Algunas marcas han sabido aprovecharse de esta tendencia social para generar contenido y aplicarlo en su estrategia de markerting. Es el caso de Pizza Hut, que ha publicado en su canal de Youtube un falso documental titulado The Dangers of Selfie Sticks PSA (Los peligros del palo selfie). El vídeo, realizado por la agencia Shareability, muestra de forma cómica las posibles amenazas que conlleva el uso de los palos para selfies.
